En el blog pasado estuvimos abordando habilidades blandas tales como: trabajo en equipo, comunicación asertiva, resiliencia y autogestión (puedes leerlas haciendo clic aquí).
Una de las habilidades blandas a las que debemos prestarle atención parece muy obvia pues debe acompañar cualquier tipo de trabajo y/o faceta de la vida. Pero ya veremos por qué un desarrollador debe hacerlo parte integral de su, llamémoslo así: kit de habilidades blandas.
RESPONSABILIDAD
No hay duda de que una faceta que evidencia con claridad el profesionalismo es la responsabilidad. Labra el grado de confianza que como desarrollador le transmite a sus compañeros de trabajo y al líder del equipo. Claro está que para tener responsabilidad necesitas de otras habilidades blandas, por ejemplo, la capacidad de autogestión que analizamos previamente y que forma parte intrínseca de una persona responsable. Adicionalmente la puntualidad, la organización entre otros son atributos que establecen las bases de una relación sólida con los demás, y que sin duda te permitirán darle un impulso a tu carrera. Esta es una de las habilidades blandas que requieren de una acción consciente y deliberada, día tras día, para no permitir que características indeseables estropeen tu relación laboral y personal con los demás.
RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS
Básicamente, cuando trabajas en software, o en cualquier rama de la tecnología, tu trabajo es la resolución de problemas. Tener la capacidad de abstracción, de aislar los problemas y dividirlos en problemas más pequeños para ir solucionándolos uno por uno hasta que un problema mayor esté resuelto. Esta capacidad aporta muchísimo valor tanto dentro de los equipos como en el global de la compañía para la que trabajes. La resolución de problemas está bastante conectado con la actitud del desarrollador, pero a lo anterior se le suma una adecuada planificación junto con la capacidad de ver la solución de problemas con un enfoque creativo.
Contenido
HABILIDADES INTERPERSONALES
De manera sencilla las podemos definir como un conjunto de destrezas que nos permiten relacionarnos y establecer vínculos estables y efectivos con todo tipo y nivel de persona, así como con grupos. Sin duda somos seres sociales y en este caso que -como lo vimos en el apartado de resolución de problemas- pensamos en soluciones para los problemas de otros mientras trabajamos en equipo, lo que hace esencial catapultar nuestra función dentro del equipo al entrenar las virtudes de asociación con nuestros compañeros que permitan del trabajo en cualesquiera de los proyectos en los que estemos inmersos como una experiencia agradable y que culmine con éxito. ¿De qué depende lo anterior? Para empezar, de nuestra capacidad de estar listos a escuchar activamente. Si alguien habla y antes de que termine de hablar ya estamos pensando en una respuesta, esto interrumpe nuestra atención y quizá terminemos diciendo algo que no es procedente -Sin contar lo incómodo e incluso irrespetuoso que puede llegar a ser- y por ende no sume a las iniciativas grupales. Además de lo anterior, queremos sumar cualidades como el respeto, tolerancia, y la capacidad de ponerse en el lugar de los demás, es decir, la empatía. La suma de estos conceptos ciertamente hace la diferencia.
No hay duda, las habilidades blandas son un valioso impulsor en el mundo de la tecnología y el desarrollo de software. Sin embargo, existen unos hábitos que son el enemigo número uno de los programadores. ¿Quieres saber de qué se trata y cómo combatir esos bugs internos del desarrollador?
Este tema lo trataremos en el próximo blog.